Todo comenzó cuando Michael Reynolds,
arquitecto cansado de trabajar una arquitectura convencional, decidió usar
elementos de desecho para construir y desarrollar un sueño. Para ello se
trasladó, con su familia, a Taos (Nuevo México), corría el año 1978. Allí,
donde la especulación urbanística no existía, comenzó una aventura que hoy en
día es todo un fenómeno que se ha trasladado por todo el mundo, incluso aquí en
España.
Durante cerca de 25 años, experimentó con
diferentes modelos de diseño y materiales hasta encontrar un sistema
constructivo basado en la reutilización de materiales de desecho, como
llantas de vehículos, botellas de vidrio y botes de aluminio. Incluso, en los
primeros tiempos desarrolló y patentó un “bric” a base de latas de cerveza.
Hoy, en Taos, Nuevo México, en una extensa llanura de casi 2000 metros de
latitud, se pueden encontrar multitud de personas que viven en casas
construidas con neumáticos, muy bonitas, perfectamente integradas en el
entorno, ecológicas y completamente autosuficientes.
Earthships
Las Earthships, desarrolladas por Michael, es una
idea de vivienda ecológica, que no depende de las infraestructuras normales,
como ocurre con una vivienda convencional, además son edificios que no cargan
impuestos a los recursos naturales del planeta. La base es una construcción
totalmente autosuficiente energéticamente, que no consume materias primas no
renovables y utiliza materiales de desecho de nuestra sociedad que se reciclan.
Además, la idea es exportable: su diseño puede, perfectamente adaptarse a
cualquier parte del mundo, claro está, siempre que haya ruedas, botellas de
cristal y latas de cerveza..
Son viviendas muy acogedoras, amplias y cómodas, en
donde es posible, incluso, cultivar comida y tener plantas tropicales a casi
2.000 m. sobre el nivel del mar, en una climatología que puede llegar a -30º C
en el exterior. La explicación está en el diseño bioclimatico del edificio que
aprovecha la inercia del suelo del terreno (que suele estar a una media de 18ª
C). Gracias a esto, la incorporación de calor adicional no es mucho y con unos
simples colectores solares y un sistema de apoyo es suficiente para disponer de
20º C en el interior.
El concepto
La
Earthship es un concepto que se está exportando por muchas partes del mundo:
Bélgica, Japón, incluso ha llegado aquí (ver recuadro). Se basa en un diseño
estandar de módulos, adaptados a las exigencias de las personas que van a vivir
en el. Las paredes de carga se construyen a base de cubiertas desechadas
rellenas de tierra de la excavación que a continuación son esfoscadas con
arcilla mezclada con paja, colocando en los grandes huecos entre las ruedas
botellas y latas. Siempre construyen con pendiente orientada al sur con
un gran invernadero. Las viviendas son autosuficientes y para ello incorporan
el “modulo energético” (paneles fotovoltaicos y colectores solares). También
disponen del “módulo de agua”: grandes depósitos para acumulación del agua de
lluvia, muy escasa en esta región de Nuevo México.
El
secreto del gran confort interior de estas viviendas se basa en una sinergía de
varias ideas: por una parte, la pared norte, este y oeste se construyen con un
muro de cubiertas de vehículos de casi 1 metro de ancho, tras un talud o
excavación de la pendiente -lo que le confiere gran inercia térmica-, un buen
aislamiento en los tejados y grandes ventanales, con doble cristal, al sur, con
uno dos y hasta tres invernaderos.
Todos los
materiales son naturales: tierra y paja en las paredes, maderas tratadas con
productos tradicionales, pinturas de tierra, baldosas de barro cocido y losas
de piedra.
El agua
Toda el agua de lluvia y nieve es recogida en
los tejados y llevada a un gran depósito que se encargará de distribuirla por
la casa. La depuración se basa en un ingenioso sistema de reciclaje. Las aguas
grises pasan a una depuradora verde instalada en el invernadero, donde
las plantas ornamentales y comestibles (inmensas plataneras y otros
frutales crecen en condiciones ideales) encuentran todas sus necesidades
de nutrientes, humedad y calor. De allí, el agua, es llevada a la cisterna del
inodoro. Las aguas negras son depuradas en unos digestores solares, que están
frente a la casa y de los que se extrae, una vez bien digestado, el compost que
se utilizará para las plantas de los invernaderos. Un ciclo completo de
regeneración del agua que contribuye a su ahorro.
Energía
Toda la energía que es necesaria en la
vivienda la produce la propia vivienda, para ello dispone del “módulo de
energía”: células fotoeléctricas y aerogeneradores para producir la
electricidad necesaria y colectores solares para calentar el agua. Los grandes
ventanales del invernadero, la aberturas superiores de ventilación e luminación
y el ahorro energético con bombillas y electrodomésticos de bajo consumo,
contribuyen a un gran ahorro.